Organización como antitesis de la espontaneidad y el positivismo

La cuestión de la organización, así como la lucha contra la espontaneidad de las masas y su potencial respuesta tanto en actos de provocación como en susceptibles acciones es, ha sido y será una cuestión a tratar de vital importancia en el seno de los diferentes movimientos. Sobre este tema tenemos amplios referentes como por ejemplo El izquierdismo enfermedad infantil del comunismo de Lenin.
Pero la cuestión no solo radica ahí, existe otro aspecto que se solapa y funde con la espontaneidad. Se trata del positivismo, del positivismo en el aspecto indisoluble de la espontaneidad como estadio mágico supraterrenal al que llegan las masas cuando las condiciones son las adecuadas.
Esta es una cantinela que de uno u otro modo hemos escuchado a menudo de boca de alguna persona, pero estamos en la obligación de retirarle el velo que le ciega o desenmascararle si su intención perjudica el movimiento.
La magia no existe sino que son ilusiones ópticas, no existe un estadio superior de las masas que han permanecido alienadas durante décadas o siglos y como quien pulsa una tecla despiertan de su sopor, y sobre todo respondamos a quien, que y cuando respecto a las condiciones. Quien las juzga optimas, que condiciones y cuando se dan.
Ese positivismo del despertar de las masas alienadas por si mismas y de ahí se desprenda su organización es un flaco favor al movimiento. La organización, así como la estrategia y la táctica a seguir, ha de estar perfectamente preparada y estudiada tanto para su aplicación diaria como para su potencial necesidad futura.

• Crisis
La situación de crisis, y más aun tratándose como se trata en la actualidad de una crisis sistémica, la confrontación en la lucha de clases se agudiza.
Ante la recesión económica y también como excusa de ella, se enconan aun mas las situaciones ya de por si acuciantes de las clases trabajadoras. Las condiciones de precarizan y se generalizan todo tipo de abusos y excesos como consecuencia de esto.
Las crisis tradicionalmente han sido baluarte de las masas de desposeid@s y explotad@s en el que se hacían fuertes en su último rescoldo para mantener su posición y remontar hasta lograr nuevos derechos.
Es la situación de las condiciones y la correlación de fuerzas, la de la represión, precariedad, etc. pero no por ello la de la revolución ni la de la concienciación como se ha preocupado de mostrarnos la historia.

• Cuanto peor mejor

La retórica del cuanto peor mejor, es precisamente eso, pura retórica si se la deja por si misma. Las condiciones más pésimas no implican incondicionalmente un auge de la conflictividad, ni tan siquiera de la concienciación y muchísimo menos de la adhesión de grandes masas a la lucha por la liberación.
Como contrapartida conocemos desde políticas chantajistas que dejan respirar al borde del abismo, pasando por políticas de concesión, hasta la más brutal de las represiones.
Si bien no es menos cierto que durante estos periodos el tiempo parece convertirse en un condensado de si mismo, donde los días pueden asimilarse a meses y los meses a años en situaciones de “paz social”. Suele reconocerse como las clases humildes logran una experiencia y viven unas situaciones que les hacen crecer con una velocidad vertiginosa comprimiéndose hasta llegar en algunas circunstancias en una concentración explosiva.
Pero esta retórica también es una excusa perfecta para el conformismo aliado del reformismo y de la paz social en la que durante su regencia sirve como opiáceo de las masas mas vanguardistas en un intento de ceder toda iniciativa al azar, a la espera, a la llegada del momento o de las condiciones forzando de este modo a la pasividad con todo lo que ello conlleva a gentes cuya iniciativa seguiría aumentando la inercia de las masas hacia su objetivo.



• El gigante de los pies de barro

A la hora de atacar los elogios a la espontaneidad de las masas, así como de las otras cuestiones que hemos tratado como la del fulgurante ascenso se ha de tener en consideración otras consecuencias que pueden surgir en el aspecto táctico.
Al igual que ocurre en la guerra, se pueden optar por varias tácticas siendo conscientes de los riesgos que cada cual conlleva. Podemos realizar una ofensiva relámpago en la cual avancemos a un ritmo vertiginoso, sorprendiendo en un primer instante al enemigo y abarcando el mayor territorio posible al sernos favorables las condiciones.
O bien podemos optar por un ataque controlado buscando un equilibrio entre el territorio ganado y la infraestructura que vamos dejando tras nosotros.
En el caso que tratamos, la situación no difiere apenas.
Un ataque sin organización, en la que esperamos a que se den unas condiciones puede tornarse una derrota sangrienta como la historia nos ha demostrado.
Un ataque sin un ejercito disciplinado, entrenado, con directrices claras y concisas sobre sus objetivos que avanza a la carrera sin ocupar los vastos territorios que va dejando tras de si, en un principio tal vez sea capaz de sorprender a su adversario y de conquistar grandes áreas. Pero a su vez una vez superada esa primera y fugaz fase, se encontrara con un ejército enemigo adiestrado, con tácticas, con trincheras, con refuerzos. Y no solo eso, sino que además al lanzarse sin organización con la que administrar las zonas ganadas deja tras de si extensas áreas para que campen a sus anchas una quinta columna que puede causar estragos en una retaguardia desordenada.

Por tanto la espontaneidad tan idolatrada por sectores es un factor de regresión tanto en la capacidad organizativa como en la necesaria táctica y estrategia a desarrollar por el movimiento. Solo enfrentándose desde una posición de radical confrontación se puede desenmascarar y hacer ver de lo negativos de su aportación a la lucha por la liberación.
Es algo característico del utopismo, del socialismo utópico si se quiere de los Saint simon o de los Fourier pero sin la excusa con la que contaban sus pioneros. La historia esta para analizarla y sacar conclusiones a través de las experiencias adquiridas por los diferentes movimientos a lo largo de los siglos
Por algo Marx y Engels definieron como socialismo científico su teoría diferenciándolo de los utopistas.
El ser humano posee la capacidad de imaginar y adelantarse a los cambios que puede generar mediante la imaginación. Pero imagina como quedara tras su intervención, precisamente para facilitar su intervención porque en la imaginación nunca obtendrá mas resultados que los productos de su propia imaginación.

EITB aspaldiko!

El ente vasco de radio televisión publica continua su cruzada particular desde la llegada del fascismo al poder autonómico vascongado. Tras la limpieza ideológica y la depuración de invitados, contertulios, presentadores y trabajadores/as se le seguía pidiendo más.
Pero no era más debido a sus deplorables y paupérrimos números en cuanto a audiencias a pesar de ser los peores en muchísimo tiempo, sino a su único y exclusivo objetivo.
La televisión al igual que sus otros medios se ha convertido en una parodia de lo antidemocrático del parlamento vasco, donde una minoría se ha hecho con el poder y pretender hacer ver que eso no es más que una ilusión creada por los nacionalistas.
A diario una buena parte de los telediarios se ciñen única y exclusivamente a los innumerables actos de apoyo a las victimas del terrorismo, vamos a sus victimas. Los casi diarios homenajes inunda la parrilla mientras son apaleadas las victimas de la otra parte en cada homenaje.
Además necesitaban cambiar programas tras haber liquidado a una gran parte de los participantes como es el caso de “pásalo”, donde a pesar de no ser santo de mi devoción he de decir que la pluralidad era incomparablemente mayor.
Para suplirlo llega el señor Urrusolo junto a otros ilustres personajes de la 5ª columna vasca, gran españolista donde los haya y repleto de ataques furibundos contra quienes no claudican ante sus posiciones. Por si no era poco con este “peculiar” presentador y opinador supino( es decir, su reflexión es la ultima y sienta cátedra), se rodea de una actriz española que creo que alguna vez vino al festiva de donosti cuando aun la contrataban en películas, profesores universitarios que aluden a gente desprestigiada y denostada hace mucho tiempo, etcétera.
Durante el programa tienen su parte de política donde la mayoría besan por donde pisa el presentador, y el PP-SOE por ende. Una continua replica que llega a aburrir de gente que lee guiones preescritos, que algunos viven a mucha distancia de aquí, que siempre van al son que les dictan sin un ápice de conciencia critica. Entre tanta ostia que siempre lleva el mismo destino, se intenta una vez mas legitimar el bodrio que hace y como lleva esa casa de citas cuando comienza a argumentar a la única contertulia que es mas vasquista es la que mas ha hablado y que no la corta y que se puede demostrar eso. Vamos que les tienen hasta lo que hablan controlado, no me esperaba menos de los GALosos.
Por si no fuera poco con el programa hecho a su medida, repite una y otra vez los estribillos subrayados en fosforito para que la gente se quede con ellos. Legitima todas y cada una de las atrocidades que cometen contra la disidencia vasca y contra todo lo que les lleve la contraria. Autenticas barbaridades y gilipolleces de las más rebuscadas se pueden degustar cada tarde en este programa de sobremesa capaz de lograr un corte de digestión.
Eso si, después de perlas como que “aquí estamos todos representados” y “aquí se puede defender todas las ideas, pero sin pistolas….sin pistolas!” se despide con su retórica vascofona porque el vascuence también es de tod@s siempre y cuando se quede en eso, aspaldiko!